¡Los Sacrógritos son unos Berserkers cuya fuerza aumenta cuando reciben golpes! Ya que no temen las heridas, a menudo están en primera línea, por eso son muy apreciados por los grupos de aventureros. El Sacrógrito es el verdadero compañero ideal para pasar largas noches luchando...
Perfil de sacrógrito[]
Especialidad: Cabeza de turco resistente.
Puntos fuertes: Tanque y posicionamiento.
Características Principales: Vitalidad
Armas favoritas: Ninguna
Primeros hechizos: Castigo Forzado, Pie de sacrógrito, Atracción
Tácticas Favoritas:
- Recibir golpes para devolver el doble, propinar castigos severos al adversario.
- Captar la atención del enemigo atrayéndolo cerca.
- Cambiarse de lugar con otro combatiente y sacrificarse para proteger a un compañero del enemigo.
- Aumentar los daños de sus aliados para combatir su dolor.
- Esquivar ataques.
La sangre de sacrógrito[]
Los sacrógritos son buenos amigos, con derecho a latigazo.[]
Los sacrógritos suelen buscar a menudo la compañía de otros aventureros, aunque su físico no les ayuda mucho. No porque sean feos, al contrario: Las sacrógritas tienen esa belleza que te pone la carne de tofu... Pero a primera vista, uff! ¡Por los dioses! No hay que fiarse de las primeras impresiones. Imagina que se te cruza un sacrógrito en un bosque oscuro a luz de la luna... en efecto, puede que se te pongan los pelos de punta: su silueta erguida, músculosa, dinámica, sus antebrazos llenos de sangre, sus ojos clavados en los tuyos... Uno dice: ¡Uy, ese mejor tenerlo de mi parte que en contra mía!
Afortunadamente tienen un gran sentido del humor que los hace muy simpáticos. No hay nada más divertido que un sacrógrito que pide sonriendo que le peguen mas fuerte, que le partan los huesos (y no sólo los suyos). En una reunión, te puede contar chistes para desangrarte vivo. Es un invitado divertido, capaz de hacer malabares con los órganos de sus enemigos.
En resumen, los sacrógritos son los compañeros ideales para las largas noches de guerra.
Es increíble lo que se puede hacer con la carne[]
Curioso por naturaleza, los sacrógritos tienen una verdadera pasión por la anatomía. Las malas lenguas cuentan que más que pasión, es una obsesión. De ahí su reputación un tanto sospechosa: Es verdad que admirar como se hinchan los músculos o como se mueven las articulaciones es un pasatiempo un tanto extraño. No será la primera vez que alguien sorprende a un sacrógrito palpando, tanteando o metiendo los dedos por todas partes... aunque alguna les gusta a más que otra. Aunque su manía preste a confusión... ¡Es muy útil para que la magia opere!
Son unos excelentes carniceros, a los que les encanta picar la carne y deshuesa los cuerpos sirviéndose sólo de sus manos. Si alguno toma el camino espiritual, será un excelente arúspice. Al no tener miedo de los golpes, ni de las heridas, siempre están en primera línea, algo que aprecian mucho los grupos de aventureros.
Expresiones típicas - Hablar sacrógrito[]
La palabra "sangre" evidentemente está muy presente en el vocabulario que emplean los sacrógritos, aunque no tenga la exclusividad. Aquí tienes una lista de florilegios de la lengua sacrógrita, que en general se explican por sí mismos:
- ¡Pura sangre!: Grito de guerra que se lanza al principio de un combate
- Buena Sangre: réplica de un sacrógrito que te tiene confianza.
- La sangre llegará al río: si un sacrógrito se dirige hacia tí de esta forma, es que cree que le has mentido... No estaría de más salir corriendo.
- Subir la sangre a la cabeza: se dice de un adversario que pierde la calma, monta el cólera y pierde la razón.
- Sudar gotas de sangre: exclamación de júbilo, tras un combate bien llevado a cabo, como ejemplo de su uso "¡Ja ja ja, la que le he metido! He sudado gotas de sangre"
- ¡A sangre y fuego!: Exclamación de sacrógrito cuando sus camaradas de aventura le golpean y que admira la potencia que saca de dicho sufrimiento. Incitación a realizar dicho acto.
- Alegrar la sangre: se dice cuando los compañeros golpean amistosamente a un sacrógrito.
- Hacer hematomas: saludo amistoso que consiste en darse golpes en las partes mas blandas del cuerpo con otra parte (dura, preferentemente) Por ejemplo: golpe mejilla-codo, vientre-rodilla, en fin, todas las variaciones posibles
- Cuajar la sangre: aburrirse. "No queda ni una jalato, no tengo nada que hacer...¡Se me va a cuajar la sangre!"
- Expresión anónima: "Bullir la sangre": el nerviosismo, como la excitación, tienen efectos psicológicos particulares en los sacrógritos. Por eso suelen decir: "Cuando me bulle la sangre, me bulle el bollo"